Es una brisa helada y silenciosa la que recorre los espacios vacíos y complejos. Normalmente es una etapa sufrible, de infinitos temblores, de paisajes descoloridos y secos, pero húmedos. Un enjambre de lana ambulante, enojada, cansada... deseosa de calor, de ideas, vestidos, flores y encierro... Un encierro que nunca abandona, se abraza en los pies y hecha raíces pesadas, inexplicables, que exhalan culpa, un tormento y dos catarsis... bueno, una catarsis y media.
por supuesto, todo termina en risas, silencios... agradables sí, siempre... pero esas raíces... su soberbia, su sonido mudo, su sentimentalismo engañoso; el verdadero obstáculo, la real piedra que te rompe los dedos... esas raíces.....
Tormento de mis tormentos, dice la canción... y después viene la inutilidad, la soledad, el libro como único amigo, una vida virtual, una existencia remota de cada tanto... nada importa pero se sufre igual... la hipocrecía disfrazada... aún así no importa realmente, un momento pasajero, catarsis y media y todo vuelve a ser igual... un tiempo.
Una ventana, una mujer con carro de compras (pasa dos veces), un señor en bicicleta (lo espero pero no vuelve), un chico con un galgo emponchado (carreras), el árbol que estaba sin hojas pero ahora ya sin ramas y pronto sin nada.... un día bastante movido eh...
Es muy frío el invierno, sólo espero que la llovizna traiga algo... y la nieve? duró sólo 20 minutos éste año....
Un mundo dentro de otro mundo en el sueño del mundo de un mundo en otra dimensión..... estratósfera.
